¿Conoces las diferencias entre un horno y una incubadora?
IMCOLMEDICA te explica cómo determinar cuál es el adecuado para tu laboratorio.
Los hornos y las incubadoras son equipos de calentamiento utilizados en diversos procesos dentro del laboratorio. La diferencia entre ambos radica en la temperatura a la que debe llegar tu proceso y la especificidad en la temperatura que necesitas.
Los hornos, por lo general, alcanzan temperaturas superiores a los 250°C; con Memmert, podemos llegar a temperaturas de hasta 300°C. A estas temperaturas, se realizan procesos como el secado de muestras, la deshidratación y otros procesos industriales. Al manejar temperaturas tan altas, la precisión de la temperatura suele rondar 1°C, dado que, a 200 grados, la diferencia entre 200 y 201°C no es determinante para el proceso. Estos hornos pueden ser de vacío, de convección natural o convección forzada y contar con características adicionales como trazabilidad y control por software, entre otras, las cuales exploraremos en un próximo blog.
Por otro lado, las incubadoras están diseñadas para trabajar a temperaturas más moderadas, desde la temperatura ambiente hasta los 80°C, y se utilizan para proporcionar las condiciones necesarias a muestras biológicas. Ya sea para el crecimiento de microorganismos, diagnóstico de procesos o diagnósticos médicos, debido a la especificidad de estos procesos, la precisión de estos equipos debe ser mucho mayor que la de un horno. En Memmert manejamos precisiones de 0,1°C, asegurando las condiciones óptimas del proceso de tu laboratorio.
Al igual que los hornos, las incubadoras pueden ser de convección natural o forzada, pero también pueden tener refrigeración. Dado que tanto los hornos como las incubadoras comienzan su trabajo a partir de la temperatura ambiente del lugar donde están instalados y siendo equipos que deben trabajar con biológicos, en algunos casos, donde la incubadora va a trabajar en ambientes de clima cálido, es necesario considerar la compra de un equipo con refrigeración que nos proporcione la temperatura adecuada para nuestro proceso. Las incubadoras, al igual que los hornos, pueden contar con características adicionales como trazabilidad y control por software, entre otras.